Los tratamientos de estética facial cada vez están más de moda entre la población, y los métodos para realizarlos cada vez son más novedosos y revolucionarios, pero hay uno que está en boca de todos: las inyecciones de toxina antiarrugas. En este post te contamos más información sobre este tratamiento y desvelamos algunos mitos en relación a esta sustancia.
El tratamiento más popular de estética facial
La toxina antiarrugas es un tratamiento autorizado por la Agencia Española del Medicamento con fines estéticos, y cuyo fin está destinado a eliminar las denominadas “arrugas de expresión” que aparecen cuando realizamos determinados gestos faciales.
La aplicación de esta toxina antiarrugas es más amplia en estos últimos años. No se reduce únicamente al tercio superior de la cara, también se aplica a la parte inferior e incluso al cuello.
También está indicado no solo para eliminar arrugas, sino para otros tratamientos como la eliminación de la sudoración excesiva, así como tratamientos de neurología y oftalmología.
Grandes mitos sobre la toxina antiarrugas
Sobre este tipo de sustancia han surgido una serie de afirmaciones que han llegado incluso a generar confusión entre aquellos que están pensando realizarse este tratamiento. Alguno de estos mitos son:
“La toxina antiarrugas es toxica”
Falso. La toxina específica para la eliminación de arrugas del tipo A que se utiliza en el tratamiento se encuentra en cantidades ínfimas y son totalmente inofensivas para el cuerpo humano. Sí que es necesario prestar atención a pacientes con hipersensibilidad o problemas de infección en la zona a tratar.
“Este tipo de tratamiento sirve para rellenar las arrugas”
Falso. Los tratamientos con toxina antiarrugas con contienen elementos de relleno, por lo tanto, no aporta volumen alguno. Está indicado principalmente para la eliminación de las arrugas de expresión.
“El tratamiento con toxina antiarrugas es doloroso y tiene efectos secundarios”
Falso. Las agujas que se utilizan para inyectar dicha toxina son muy finas y se utilizan a nivel intramuscular, por lo que el paciente solo siente una ligera molestia que se disipa en el momento de finalizar el tratamiento.
“En el mercado comercializan cremas antiarrugas con esta toxina y hacen el mismo efecto”
Falso. Se tratan de productos cosméticos que no penetran en el músculo y, por tanto, no tienen los mismos efectos que este fármaco inyectable. Tan solo sus resultados son superficiales y no son equiparables.
“Si estás embarazada no puedes someterte a este tratamiento”
Verdadero. Esta contraindicado para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
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