Los chasquidos articulares, el rechinar de dientes, la presión masticatoria… La ATM. Es consecuencia de la evolución humana y con ella de la estética.
La ATM se ha modificado por hipoplasia (disminución) del tamaño del maxilar superior y la mandíbula inferior. La masticación de alimentos cada vez más blandos y en trozos más pequeños, es responsable de ello. Los dientes, sin embargo, no han disminuido tanto su tamaño y por eso la famosa “muela del juicio” no tiene espacio.
La estética con la ortodoncia, el estrés de esta sociedad, la genética LA PÉRDIDA DE PIEZAS y la evolución…, tienen como consecuencia una alteración de la ATM que causa dolor, chasquidos, luxaciones, artrosis, desgaste de las piezas dentales y BRUXISMO.